Estrés postraumático causado por sismos Bases teóricas 76 militantes feministas; desde ese lugar, se puso de manifiesto la importancia de visibilizar las crudas realidades familiares, dejando de lado la concepción tradicionalista para comenzar el proceso de cuestionamiento y deconstrucción de la institución (Hernández, s/f). Desde un marco jurídico, pareciera que la familia tradicional está destinada a desaparecer en el futuro; no obstante, se han reestructurado sus concepciones a partir de sus profundas modificaciones, hasta llegar a clasificarlas en familias: a) extendidas, b) alternativas, c) que implican la convivencia estable sin matrimonio (con o sin hijos), d) monoparentales, e) integradas por personas del mismo sexo y f) tradicional (Hernández, s/f). Familias monoparentales En estas familias, un progenitor es el responsable de los hijos e hijas menores o dependientes. La mayor parte de estas familias tienen su origen en la separación, el divorcio o fallecimiento de uno de los padres, aunque se está produciendo un incremento de mujeres solteras que deciden tener hijos o adoptarlos sin la presencia de una pareja. Así también, se observa cada vez con mayor frecuencia a padres que, por diferentes circunstancias, asumen el cuidado cotidiano de sus hijos e hijas, y ejercen su paternaje sin la presencia de una pareja, ya sea por adopción o asumen la custodia de los hijos fruto de una relación anterior. En los procesos de migración se observa un fenómeno interesante, ya que es común encontrar que uno de los padres se haga cargo durante un periodo de tiempo de la familia hasta que consiguen la reagrupación familiar; en otros casos, permanecen en familias monoparentales.
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