Estrés postraumático causado por sismos - Programa de intervención

Prefacio V Es necesario señalar que la ayuda psicológica deberá ser coordinada desde la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, para luego convocar a la academia y asignarle sitios donde deberá proveer el apoyo, una vez que cuente con voluntarios capacitados para hacerlo. Además, se propone incorporar a los Guardianes de Emergencia Postrauma para apoyar en la detección y canalización oportuna de los habitantes para los primeros auxilios psicológicos, siguiendo el algoritmo. Un segundomomento de la intervención es realizar seguimiento de las personas atendidas durante el siguiente año y detectar aquellas que presenten estrés postraumático para ser referidas a los centros de salud. Con base en lo anterior, el presente texto incluye una capacitación de 40 horas para psicólogos en formación y aquellos que ya trabajan en el campo clínico, en la que se provee de elementos del Curso virtual. Primeros auxilios psicológicos con el modelo de atención de la Universidad Autónoma de Barcelona (2015); se revisan los principios de la psicoterapia cognitivo-conductual planteada por Judith Beck (2000), la cual tiene una sólida alianza terapéutica, centrada en el presente, en problemas y objetivos determinados, un componente psicoeducativo, enfatiza la participación y la colaboración activa, sesiones estructuradas y ayuda a las personas a identificar y a evaluar los pensamientos disfuncionales. La parte más importante del entrenamiento describe la sintomatología de estrés tanto agudo como postraumático, y presenta la terapia de exposición prolongada (Foa, Chrestman, & Gilboa-Schechtman, 2008) y la restructuración cognitiva (Beck, 2000) como técnicas fundamentales para el trabajo de estos trastornos. Asimismo, se revisan dos problemáticas relacionadas: la sintomatología depresiva y las conductas asociadas al suicidio, así como técnicas para su intervención (activación conductual, reestructuración cognitiva y planes de seguridad). Cabe señalar que el énfasis del entrenamiento radica en el fortalecimiento del apoyo social como el mejor predictor de salud mental en las comunidades (Turner, Frankel, & Levin, 1983). La primera parte del entrenamiento contempla un protocolo de primeros auxilios psicológicos para atender a la población después de un desastre, el cual se basa en cuatro componentes: contener, informar, normalizar y consolar. Enseguida, se presentan materiales e información sobre el estrés agudo para compartir con los usuarios, así como un ejercicio de respiración diafragmática para practicarse en casa todos los días y actividades adaptadas para población infantil con el fin de que puedan comprender los síntomas que vive un niño después de un desastre natural.

RkJQdWJsaXNoZXIy MTI3NTM=